Hacer cine, aparentemente, no es una tarea fácil en países como Chile y, pese a eso, existen directores que muy valientemente se atreven a incursionar en esta riesgosa actividad. Nicolás Jullian es uno de ellos y en la siguiente entrevista nos cuenta algunos de los entretelones propios de tan interesante trabajo.

Además recientemente estuvo en la cartelera de los cines nacionales su primer largometraje llamado “Límite”, que fue filmado íntegramente en locaciones de Viña del Mar, Valparaíso y alrededores, y que es una ingeniosa producción de tipo policial, género que en líneas generales casi no ha sido explotado por los cineastas chilenos.

¿Cómo es hacer una película en Chile? ¿Con cuánto presupuesto contaste para filmar “Límite”, tu primer largometraje?

NJ: Es muy difícil, porque los fondos concursables de los que se dispone son objetivamente muy pocos, en relación con las películas que se pretende sacar cada año. El Fondart solamente puede financiar unos seis largometrajes al año y hoy en día se presentan no menos de 25 directores a solicitar fondos para sus películas. Se está pensando en producir no menos de 18 largometrajes al año, de los cuales muchos terminan finalmente detenidos y sin terminarse por falta de fondos. La película que hice comenzó con un presupuesto bajísimo de diez millones de pesos, pero con esa cantidad se la podía terminar. El tema es que para dejarla en formato de 35 mm hubo que añadir otros 50 millones de pesos al presupuesto inicial. En total se gastaron unos sesenta millones de Pesos en producirla.

¿La película se hizo originalmente en formato de video o utilizaste algún otro medio?

NJ: No es video, es cine digital. Se usa un formato de video, pero que graba 24 cuadros por segundo. Posteriormente se pasa al formato de 35 mm.

¿Cómo fue la respuesta del público? ¿Hubo una asistencia satisfactoria a las salas de cine para ver la película?

NJ: En las salas comerciales no hubo una asistencia satisfactoria, porque la película no pudo estar mucho tiempo en cartelera. No pude luchar contra la maquinaria hollywoodense. En total la película fue vista por unas diez mil personas aproximadamente, contando festivales y exhibiciones privadas.

¿Se va a exhibir comercialmente fuera de Chile también? ¿O todo va a quedar en casa?

NJ: Eso se va a comenzar a negociar en noviembre, debido a que me cambié de distribuidor y va a haber otro que se va a encargar de la distribución.

¿En qué países crees que se exhibiría? ¿Aquí en la zona o más lejos?

Principalmente en los Estados Unidos de Norteamérica y posiblemente en algunos de Sudamérica.

Cuéntame algo respecto de tu próxima película.

¿Qué adelantos me puedes hacer? ¿Ya sabes cuáles van a ser los temas o argumentos que se van a tratar?

NJ: Son dos historias muy concretas. Una tiene que ver con una juventud o adolescencia un poco osada que culmina con una violación, la cual es perpetrada por dos jóvenes, los que posteriormente buscan alguna manera de liberarse de esta culpa que los agobia. La otra historia es más ambiciosa y tiene que ver con la toma del morro de Arica en la guerra del Pacífico (1879 – 1883). Específicamente es la historia de un soldado que se ve obligado a dejar a su familia en más de un episodio, para cumplir una tarea que no sabremos nunca si es la correcta.

¿Cuándo esperas realizar estas filmaciones? ¿Cuál vas a hacer primero?

Yo creo que la más sencilla, que es la primera de las dos historias que nombré, debido a que de todas maneras va a ser mucho más fácil conseguir los recursos económicos necesarios. JQB:

¿Cuentas con algún tipo de auspicio o patrocinio para ello?

No, porque todavía me encuentro escribiendo el guión, pero estoy creando un lazo con un director español de la ciudad de Valencia, por lo que necesariamente se trataría de una coproducción.

¿Antes de este primer largometraje ya habías incursionado en algún tipo de cine? ¿O simplemente debutaste con “Límite”?

NJ: Hice dos cortometrajes y dos documentales. Uno de ellos era una obra autobiográfica de una chilena que estaba en Noruega. Muchos pensarán que era una exiliada, pero no es así. Ella había salido de Chile en busca de trabajo y rumbo a Argentina.

Allá por una casualidad terminó siendo encarcelada y torturada, sin que hubiera motivos políticos. Debido a ello Amnistía Internacional la ayudó a emigrar a Noruega. Uno de los cortos fue premiado aquí en Viña del Mar y se llamaba “El Rincón”.

¿Cuándo comenzaría el rodaje de tu próximo largometraje?

NJ: Idealmente en verano, concretamente en marzo del próximo año.

¿Cómo se ha portado la crítica contigo? ¿Fueron muy duros?

NJ: Bien y mal, tal como es en realidad la crítica con los directores de cine. En parte la acepto, conociendo las debilidades propias y la perspectiva de cada cual. Creo, en el caso del cine, que es un arte que depende tanto de su presupuesto, tras vivir la experiencia en carne propia, que la falta de medios económicos influye cuando uno quiere contar de la mejor manera una historia. Como la película que realicé no refleja el escaso presupuesto que hubo disponible, la crítica no ha puesto énfasis en ello. Además faltaron recursos para el guión e incluso esta etapa requiere de un cierto presupuesto.

¿Cuentas con actores conocidos o con experiencia para tu próxima cinta? ¿Se puede saber el nombre de alguno de ellos?

NJ: No, los actores los veré al final. Además es una coproducción con España y por lo tanto, ellos aportarán en parte sus propios actores cuando llegue el momento de filmar.